Apple ha revelado al público algunos detalles sobre la privacidad que mantiene con Siri. Según los datos, el asistente personal presente en iOS desde la llegada del iPhone 4S guarda datos personalizados de los usuarios durante dos años. Son ficheros con datos acerca de nuestra voz, que Siri utiliza para aprender nuestra pronunciación y así interactuar mejor con nosotros.
Todos los datos son anónimos: los servidores de Apple generan un código alfanumérico que enlaza con los datos de nuestra voz son guardar cosas más sensibles como nuestro nombre o el correo de nuestra cuenta de usuario. Los dos años en los que nuestra voz se guarda se pueden clasificar en dos etapas: los primeros seis meses, en los que Apple mantiene esos archivos enlazados con el código que nos identifica anónimamente; y los dieciocho meses restantes en los que Apple elimina esa identificación pero sigue guardando los archivos y así aprovecharlos para ir mejorando el asistente.
Pero aunque todo esto sea anónimo, ya hay quien se ha mostrado preocupado. En teoría deberían leerlo máquinas y software incapaces de comprender nada, pero estamos hablando de ficheros en los que se guarda la voz grabada de los usuarios. Y a veces, cuando hablamos con Siri, podemos mencionar datos sensibles. Es una teoría muy retorcida, pero si Apple almacena esos datos para coleccionar esos datos intencionadamente (no debería), la compañía se las podría ver con la ley.
Todo depende, como siempre, de lo que Apple hace con esos datos guardados. Por nuestra parte, tras haber aceptado los términos de licencia (que todo el mundo debería leer), no tenemos modo de anularlo. Si no queréis que Siri almacene vuestra voz grabada, la única solución es no usar Siri.
Vía | 9to5Mac
Imagen | Sean MacEntee