El 19 de septiembre Apple lanzó una actualización EFI para el MacBook Pro Retina de 15”. Esa actualización, versión 1.0, resolvía un problema que podría bloquear el sistema cuando la carga del procesador era alta además de un fallo con NetBoot. Pero parece que ha agregado uno nuevo, un descenso de potencia al realizar tareas exigentes.
Según aumenta la temperatura de la CPU y GPU el sistema reduce la potencia para supuestamente no dañar el sistema. Es decir, si la gráfica funciona a 850 Mhz desciende a los 700 Mhz o menos suben los grados. Por tanto, la impotencia que sufren algunos usuarios al realizar tareas exigentes como render o juegos aumenta por día. Y más acusado se vuelve cuando ejecutamos Windows bajo Bootcamp.
Tras revisar los foros de soporte de Apple se puede entrever que el problema al parecer está en como trata la información que facilitan los sensores. Es como si, el rango por el cual el equipo entra en modo de “alerta” no se corresponde con los datos reales y aconsejados por el fabricante del procesador, Intel.
Después de hablar con un propietario de uno de estos equipos no he conseguido más información ya que no ha detectado ningún funcionamiento anormal aún tras haber editado vídeo o realizar tareas de compresión. Pero es cierto que, por ejemplo, uno de nuestros lectores, Ofito, parece que sí lo está sufriendo. Rodri también ha notado problemas.
Veremos si podemos conocer algún dato extra más y si Apple realiza algún nuevo movimiento a modo de actualización o aclara a qué puede deberse dicho problema. Si es algo que se ha detectado ahora o efectivamente es un fallo tras la última actualización EFI.
Vía | Appleinsider
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