¿Cómo puedes mejorar algo que es casi perfecto? Esa es la gran pregunta que ronda mi cabeza desde que se empezó a rumorear un nuevo modelo de iMac capaz de mejorar la actual generación y de añadir al mismo tiempo novedades que devuelvan el atractivo a un equipo que nunca lo ha perdido.
¿Qué se puede mejorar en un iMac? Y es que a todos nos vienen cosas a la cabeza de como podríamos mejorar el iPhone, incluso algunos modelos de portátiles de la compañía… ¿pero el iMac?
Personalmente me siento afortunado de haber tenido la suerte de haber usado todos los modelos de iMac lanzados hasta la fecha menos el modelo original. Todos tenían algún que otro punto mejorable pero en conjunto eran maquinas maravillosas.
- iMac G3. Fue el inicio de la saga, un ordenador que rompió moldes con su diseño y que además dejó claro que las disqueteras habían muerto para siempre.
- iMac G4. Con su diseño icónico marcó un antes y un después en el diseño industrial de sus ordenadores.
- iMac G5/CD/C2D. En esta tercera versión la compañía decidió eliminar completamente el ordenador y sus componentes para integrarlos en la parte trasera de la pantalla.
- iMac Alu. Seguramente el cambió menos representativo, aunque el nuevo acabado (manteniendo diseño) ha sabido mantenerse bastante bien en los casi 5 años que lleva en el mercado.
Equipos todos ellos que han sabido marcar a su manera un antes y un después en la gama Mac y aunque nunca ha sido el equipo multiventas de Apple (los portátiles ahí se llevan la gran ventaja) siempre ha sido el modelo más icónico de la compañía. Por lo que volvemos a la pregunta anterior: ¿qué podemos cambiar para mejorarlo?
Nuevo iMac, un nuevo reto
Personalmente no espero ver un cambio radical en el diseño del mismo, parece que Apple está conforme con el actual estilo de sus equipos, por lo que creo que en la próxima generación de iMacs vamos a ver mejoras basadas en tecnologías y no en el diseño del dispositivo.
- Mejoras en su pantalla. Si los rumores no fallan, parece que una de las mejoras importantes del próximo iMac van a estar centradas en su pantalla. No hablamos únicamente de los rumores de un posible modelo Retina (en este punto lo cierto es que no sabría si afirmar dicho rumor) se rumorea que el próximo equipo integrará una pantalla con el cristal incluido en el LCD. En la actualidad, el cristal que rodea la pantalla de los iMacs se sobrepone sobre el monitor LCD dejando una separación entre ambos bastante visible, eso sin tener en cuenta los problema a la hora de reparar el terminal (hace falta retirar el cristal para acceder al interior). Integrar cristal y LCD nos aportan algunas ventajas, por un lado mejorar el acceso interno al dispositivo, por otro disminuir las piezas y por lo tanto los puntos de fallos pero principalmente disminuir la separación entre ambas piezas mejorando los ángulos de visión lateral.
- Menos peso, menos marco, menos grosor. Parece claro que con cada generación de iMac el equipo sufre una liposución que reduce el equipo pero aumenta su pantalla. Personalmente me da igual el tema del tamaño en un equipo de sobremesa pero si hay dos detalles que se podrían mejorar. Por un lado el marco del dispositivo es algo exagerado y aunque ha sido reducido con el tiempo, si los rumores de esa nueva pantalla son ciertos, estaríamos ante un modelo mucho más estilizado y con un marco mucho más reducido que no tendría que soportar el cristal. Mi verdadera queja del equipo en términos físicos es el peso del mismo. El equipo de 27 pulgadas tiene un peso de 14 kg, una autentica burrada a todas luces (la mesa doblada que tuve que reemplazar da buena cuenta de ello), suena a tontería pero nunca he llegado ha entender por que no se ha cuidado un poco más este detalle en este modelo.
- Pensado para el usuario. En todas las generaciones de iMac el cambio de memoria RAM ha sido un juego de niños que cualquier persona puede realizar, sin embargo el cambio de HDD o disco duro puede llegar a convertirse en una auténtica locura. Así como en algunos modelos de portátiles Apple ha cuidado este detalle al máximo, sería de agradecer que la compañía hiciera el esfuerzo de mejorar el acceso a dicho componente. En la actualidad un iMac con problemas en su disco duro se resuelve en la mayoría de los casos con una factura de 400 euros en un distribuidor autorizado.
- Superficie de carga. Esta es una de las cosas que Apple no piensa integrar nunca, pero sería sumamente genial que el iMac integrase una superficie de carga en su base. De esta forma podríamos situar el Magic Mouse y teclado cuando no hagamos uso de los mismos para poder cargar por inducción la batería de los mismos. En la actualizada hay dispositivo que realizan esta mismo función, pero sería mucho mejor si estuviese integrado en el propio equipo.
Como puedes ver me conformo con poco, el actual iMac me encanta y realmente no hay muchas cosas que cambiaría de este equipo. ¿Y tú? ¿Qué le pides al nuevo iMac?
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